Al iniciar la jornada del día del pasado lunes 21 de abril, el Vaticano confirmó el fallecimiento del Papa Francisco a sus 88 años, quien había estado presentando complicaciones en su estado de salud desde hace un par de meses. Su última aparición pública fue el día domingo en el contexto de la celebración de Pascua de resurrección.
Jorge Mario Bergoglio nació el 17 de diciembre de 1936 en Buenos Aires, Argentina, proveniente de una familia de inmigrantes italianos. Desde muy joven mostró vocación por el servicio, destacando a su abuela como una de las mujeres con más influencia en su vida en el ámbito personal, ya que ella fue la que lo impulsó a servir dentro de la iglesia.
Jorge, más conocido como Francisco, se desempeñó en varios roles dentro de la iglesia católica Argentina, tales como obispo, arzobispo y cardenal. Tras la muerte de Juan Pablo II en el año 2005, Bergoglio había recibido varios votos en el cónclave, sin embargo, el papa Benedicto XVI fue elegido en ese entonces. En el año 2013 y tras la renuncia del pontífice, Bergoglio fue elegido el nuevo papa, y adoptó el nombre de “Francisco” inspirado en San Francisco de Asís.
Desde su consagración como sumo pontífice de la iglesia católica hasta sus últimos días, el Papa Francisco rompió esquemas en el Vaticano, impulsó reformas desde lo estructural hasta lo financiero, lo que conlleva a que su liderazgo ganara admiración y también detractores.
Su mensaje siempre fue directo: la iglesia debe ser una institución abierta, misericordiosa y comprometida con los excluidos. Bajo ese mismo contexto, abogó por una fe más activa en la lucha contra la desigualdad.
Dentro de las acciones que él realizó durante su papado, se pueden destacar los siguientes hitos:
- Cercanía con el prójimo: El papa Francisco fue el primer jesuita en dirigir la iglesia católica. La compañía de Jesús se caracteriza por su compromiso con la justicia social, es por eso por lo que, en su primera visita oficial como papa, Francisco se dirigió a la isla italiana de Lampedusa, donde cada año llegan migrantes africanos. Otra de las actividades que realizaba es el lavado de pies, que simboliza la última cena de Jesús con sus 12 apóstoles. Durante los más de 10 años de su mandato, el papa realizaba esta acción con hombres y mujeres privadas de libertad, inmigrantes y personas con discapacidad, tradición que su predecesor Benedicto XVI solo realizaba con hombres.
- Defensor del pueblo palestino: Francisco fue una de las voces globales más firmes a favor del derecho del pueblo palestino a un estado propio. El papa condenó las acciones del ejército de ocupación israelí en varias ocasiones y llamó a la investigación de genocidio. En su última aparición, llamó a un alto al fuego y la liberación de los rehenes.
- A favor de la inclusión LGBTQ+: Francisco fue el primer papa que se mostró abierto hacia la comunidad LGTBQ+, una de sus frases más célebres fue: “Si una persona es gay, busca al Señor y tiene buena voluntad, ¿quién soy yo para juzgarla?”. Bajo ese mismo contexto, en el documental “Amén, Francisco responde” una persona no binaria le planteó si ve un espacio en la iglesia para personas como ella, a lo que el papa respondió: “Toda persona es hija de Dios (…) Dios no rechaza a nadie, Dios es padre y yo no tengo derecho a echar a nadie de la iglesia. Más aún, el deber es recibir siempre. La iglesia no puede cerrarle la puerta a nadie.”
- La lucha contra los abusos a menores: Una de las primeras medidas que tomó Francisco al asumir como papa fue la creación de la Comisión Pontificia de Protección de Menores, así también como el despojo de privilegios a sacerdotes envueltos en casos de abuso sexual, y reuniones con víctimas alrededor del mundo, pidiendo perdón en el nombre de la iglesia y abogando por más transparencia.
- El rol de la mujer: Aunque no se han propuesto cambios doctrinales, el papa Francisco se encargó de promover importantes reformas tales como el nombramiento de mujeres laicas y religiosas en puestos clave de la Curia Romana, la creación de una comisión para estudiar el diaconado femenino, la modificación del código de derecho canónico que permitió a las mujeres el acceso a los ministerios del lector y acólitos, que previamente eran roles reservados solo para hombres, y varios discursos denunciando el machismo frecuente dentro y fuera de la iglesia.
La muerte del papa Francisco marca un cierre de una era, donde se desafiaron estructuras, incomodó a los sectores más conservadores dentro del Vaticano y devolvió a la iglesia hacía sus raíces más humildes.
Bajo su liderazgo, se tomó el tiempo de abrazar a los más pobres, escuchó a las víctimas y siempre estuvo abierto al diálogo entre diversas culturas y religiones.
Francisco deja un legado abierto, sin un punto final, luego de lograr una tarea bastante complicada: que millones de personas, tanto creyentes como escépticos, volvieran a mirar la iglesia católica como un símbolo de esperanza.
